Al hablar de metales, seguro que ha oído hablar de chapas y placas metálicas. Muchos pensamos que son lo mismo. Estamos muy equivocados al considerarlas una sola, pero son mundos aparte. Hay muchas diferencias entre las chapas y las placas.
¿Se dedica a la industria manufacturera? Utilizará los dos. Por lo tanto, es fundamental comprender sus diferencias. Si no las entiende, acabará eligiendo la incorrecta para su proyecto específico. Sin embargo, en esta guía te explicaremos todas las diferencias. Quédate con nosotros.
Visión general de la chapa metálica
Tanto las chapas como las placas se diferencian por su grosor. Las chapas suelen tener un grosor superior a 6 mm. En cambio, el grosor de la chapa oscila entre 0,5 y 6 mm. Su grosor es siempre inferior a 6 mm. Además, sus procesos de producción también varían.
Tanto las chapas como las placas metálicas tienen distinta importancia en diferentes sectores. Por ejemplo, las chapas metálicas suelen ser adecuadas para el sector de la construcción. La razón es que tienen un mayor grosor y pueden soportar la tensión. En cambio, las chapas son ideales para la industria del automóvil.
Los fabricantes las utilizan para fabricar la carrocería y el techo del coche. Suelen ser menos robustas que las chapas metálicas. Estas chapas pueden ser de distintos materiales. Entre ellos, aluminio, acero inoxidable, etc. Esto indica que tienes una gran variedad de opciones de materiales a la hora de elegir placas y chapas.
Consejo rápido: Los fabricantes utilizan las pulgadas como unidad para medir el grosor de las chapas metálicas. En cambio, utilizan galgas como unidad para medir el grosor de las chapas metálicas. Sus espesores son muy diferentes, lo que les confiere propiedades y usos distintos.
Chapa metálica vs. Placa: Principales diferencias
Como he dicho antes, conocer la diferencia entre chapas y placas metálicas es muy importante para cualquier proyecto. Si comprende las diferencias, sólo entonces podrá utilizarlas correctamente. Para ayudarte, vamos a intentar comprender las principales diferencias.
1- Proceso de producción
La diferencia significativa entre metal y chapa radica en su proceso de fabricación. Ambos se someten a un proceso de calentamiento, pero su proceso de laminado varía. Las chapas suelen laminarse en frío, lo que significa que se someten a una serie de rodillos y la temperatura se mantiene baja.
Por otro lado, la producción de chapas también implica pasar por una serie de rodillos. Pero el proceso implica laminar a una temperatura muy alta. Además, las chapas se someten a un tratamiento adicional. Esto confiere a las chapas más estabilidad y resistencia.
En pocas palabras, para fabricar chapas metálicas hay que mantener la temperatura por debajo del punto de cristalización. Este proceso hace que las chapas sean maleables y fáciles de doblar. Pero para las chapas metálicas, el calor está por encima del punto de cristalización. Estas temperaturas altas y bajas les confieren propiedades diferentes.
2- Integridad estructural
Debido a la diferencia de grosor, las chapas y placas metálicas tienen una integridad estructural diferente. Menos grosor significa una estructura más débil. Así pues, es evidente que las chapas no tienen una estructura fuerte, pero son flexibles, maleables y se pueden doblar.
Si su proyecto exige una estructura muy flexible, se recomiendan las chapas metálicas. A la inversa, las chapas metálicas tienen una estructura fuerte debido a su grosor. Esta estructura les permite combatir condiciones extremas sin doblarse. Ofrecen durabilidad a largo plazo, que es lo que exigen los proyectos ultracríticos.
3- Polivalencia
Gracias a su propiedad de flexión, las chapas metálicas son increíblemente versátiles. Pueden transformarse en diferentes formas sin romperse. Los arquitectos aprovechan la versatilidad de estas chapas para el aspecto estético de sus obras. Además, los fabricantes utilizan las chapas para fabricar piezas.
Sin embargo, las placas metálicas son menos versátiles debido a su mayor grosor y robustez. Pero eso no significa que pierdan importancia por falta de versatilidad. Su campo de aplicación es elevado en los sectores de la construcción que no exigen versatilidad. De hecho, las chapas metálicas no se pueden remodelar, pero se pueden soldar si es necesario.
4- Fabricación y transformación
En general, los metales de menor grosor son fáciles de fabricar. Las chapas, por tanto, son fáciles de procesar, ya que son finas y plegables. Su proceso de laminado se produce a temperatura ambiente, lo que reduce la necesidad de esfuerzos adicionales. Además, su fabricación requiere equipos sencillos.
En cambio, el procesado de placas metálicas no es muy sencillo. Los fabricantes tienen que utilizar herramientas de alta potencia para cortar y procesar estas placas. Entre ellas están el corte por plasma, el mecanizado CNC y el chorro de agua, que se utilizan para la fabricación. Una cosa que me gustaría mencionar es el impacto del material con el que se fabrican.
Recuerde que un chapa de acero inoxidable sería sólida. Este potente material (acero inoxidable) hace que la chapa sea fuerte y ligeramente difícil de cortar. Lo mismo ocurre con placas de acero inoxidable. Sin embargo, su corte y procesamiento resultan más fáciles si su material es más débil.
5- Peso y manejo
Las chapas metálicas son ventajosas para la manipulación por su ligereza. Se pueden utilizar e instalar fácilmente. Son fáciles de doblar con herramientas estándar y se pueden transportar a los lugares de fabricación. Además, esta ventaja de fácil manipulación aumenta la velocidad de sus proyectos. Esta es una de las razones de su popularidad.
En cambio, las placas metálicas son mucho más pesadas. Esto no es malo, ya que este peso confiere más resistencia a la placa. Sin embargo, esta gran resistencia tiene una contrapartida. Debido a su elevado peso, manipularlas puede resultar complicado. Además, su transporte de un lugar a otro también es tedioso.
6- Aplicaciones y usos
Las chapas metálicas se utilizan mucho en los automóviles. Su ligereza favorece un rendimiento sin problemas. Además, son habituales en la fabricación de carrocerías y techos de vehículos. Su flexibilidad se aprovecha en la formación de piezas de decoración. La industria aeroespacial también utiliza estas chapas.
Por otro lado, las planchas metálicas se utilizan para fabricar piezas y componentes de alta resistencia. Las compañías de gas y petróleo también las utilizan para formar depósitos. Los proyectos de construcción de puentes nunca descuidan su uso. Sin embargo, su uso es habitual en la industria de la construcción para hacer estructuras fuertes.
7- Coste y asequibilidad
El coste de las chapas y placas metálicas depende de varios factores. Las chapas suelen ser más baratas que las placas. Le explicaré la razón. Su proceso de producción es relativamente más sencillo. Las chapas metálicas son supercostosas, ya que se someten a un tratamiento adicional para su resistencia.
El grosor es otro factor que influye en su coste. Un aumento del grosor requiere más materia prima. Una chapa de 20 mm de grosor cuesta más del doble que una de 10 mm del mismo material. Lo mismo ocurre con las chapas. Sin embargo, las chapas son siempre más baratas que las placas.
¿Cuál elegir? ¿Placa o chapa?
La elección entre placas y chapas metálicas depende de sus necesidades y preferencias. Las chapas metálicas son adecuadas cuando se necesita resistencia y durabilidad. Sin embargo, las chapas son las mejores si necesita flexibilidad. Ambas ofrecen propiedades únicas.
Recuerde que el precio de las planchas y chapas metálicas puede influir en su elección. Las chapas metálicas son más baratas. Si quiere mantener su proyecto en el lado más bajo, las chapas metálicas serían una opción. Recomiendo encarecidamente elegir chapas si es usted un ingeniero que trabaja en un proyecto de construcción.
La razón es que estas placas son fuertes y capaces de soportar peso y tensiones. ¿Trabaja en la industria del automóvil? Debería elegir chapas metálicas. La razón es que su bajo peso hará que las piezas tengan menos peso. Como resultado, la eficiencia del combustible de Chile ha mejorado. ¿Quieres saber cuál es mejor?
Ambos son excelentes y ofrecen propiedades únicas. Si elige una chapa para la construcción, estará perdido. Del mismo modo, seleccionar chapas para la industria automovilística no es una buena decisión. Por eso, asegúrese de decidir su selección en función de sus propiedades. Su rendimiento le impresionará si las selecciona teniendo en cuenta sus puntos fuertes y débiles.
Preguntas frecuentes
¿Qué es más ligero: chapas o placas?
Las chapas metálicas son más ligeras que las placas. Su grosor oscila entre 0,5 mm y 6 mm. Las chapas metálicas son muy gruesas, lo que aumenta su peso.
¿Se pueden utilizar chapas metálicas para aplicaciones pesadas?
No, las chapas metálicas no son aplicables a cargas pesadas. Son ligeras y no pueden soportar aplicaciones tan pesadas.
¿Qué material es mejor para el soporte estructural?
Las placas metálicas son las preferidas para el soporte estructural debido a su durabilidad y extrema resistencia. Su mayor grosor también mejora su soporte estructural. Por ello, los fabricantes las utilizan en la industria de la construcción.
¿Se utiliza el acero inoxidable tanto para chapas como para placas?
Sí, el acero inoxidable se utiliza tanto para chapas como para placas. El acero inoxidable les confiere una mayor resistencia a la corrosión.
Conclusión
Conocer las principales diferencias entre chapas y placas metálicas es crucial. Ignorar esta diferencia puede afectar a su proceso de fabricación. Los errores en su selección le costarán tiempo y dinero y le causarán dolores de cabeza. Por ello, he mencionado todo lo relacionado con las chapas y las placas metálicas.
En resumen, las chapas metálicas son finas, flexibles, plegables y baratas. Por el contrario, las chapas son supercaras y robustas. Debido a su durabilidad, merece la pena invertir en ellas. Esperemos que este artículo te haya aclarado muchas cosas. Al final, podrás tomar decisiones de compra con conocimiento de causa.